La empresa Lokimica S.A., aplicando los últimos avances científicos, comienza a utilizar una nueva técnica contra el mosquito tigre más eficiente, persistente y efectiva, que garantiza la desaparición del insecto durante un año.
“Pintura insecticida”, también conocida como “barrera de pintura antimosquito”, es el nombre de este novedoso tratamiento. Este revolucionario sistema se puso en experimentación cuando se constató que la persistencia de otros métodos (entre ellos la silicona biodegradable, uno de los más utilizados hasta el momento y que, de hecho, se sigue usando por la mayoría de las empresas de control de plagas) no era lo suficientemente duradera, haciendo necesaria una revisión del tratamiento en el lugar de cría cada poco tiempo. Todo ello, unido al incremento exponencial de zonas con proliferación de mosquito tigre, dificultaba las aplicaciones periódicas en las mismas.
La pintura antimosquitos se convierte en un arma perfecta contra esta especie de insecto al evitar que las hembras puedan poner larvas en las paredes de los imbornales, lugar que utilizan para este fin. De esta manera, y con una toxicidad muy baja debido a la composición y a la baja volatilidad (no afecta a otras especies como a las mascotas, ni a personas con problemas derivados del sistema respiratorio como puede ser el asma), se logra cortar el ciclo de reproducción del mosquito tigre en el punto inicial.
La persistencia del tratamiento es otra de sus características. Su duración es de un año (aunque existen estudios externos que lo valoran en 18 meses), por lo que durante este tiempo se garantiza que, en el punto de aplicación, el mosquito tigre no va a poder reproducirse.
Características novedosas que cuidan el medio ambiente
Las ventajas de la barrera de pintura antimosquitos son numerosas, entre las que encontramos la baja toxicidad inicial (la materia activa se encuentra en pequeñas microcápsulas que se liberan lentamente durante un amplio periodo de tiempo), su fácil aplicación (el producto no se diluye ni se pulveriza, sino que se aplica como una pintura) y su rendimiento (ya que actúa en el pequeño espacio en el que la hembra puede poner su puesta, afectando también a los mosquitos que se encuentran refugiados).
La apuesta por un tratamiento de calidad
El sistema ha estado testado en otras ciudades americanas pero nunca había llegado a utilizarse de forma rutinaria, principalmente debido al alto coste de los productos empleados. Empresas como Lokímica S.A. (empresa nacional de control de plagas encargada de las ciudades más importantes de la Comunidad Valenciana), siguiendo la línea de investigación iniciada por los laboratorios independientes que han desarrollado este sistema, ha priorizado el cuidado del medio ambiente y la efectividad de los tratamientos.
Lokímica S.A. ha realizado diferentes pruebas durante el verano de 2015 para comprobar y maximizar la eficiencia de la pintura antimosquitos teniendo en cuenta los diversos tipos de imbornales existentes en cada ciudad, testando además su persistencia y tratando todas las zonas donde se ha detectado la presencia del mosquito tigre. Esta aplicación se centra por una parte en los puntos situados en zonas públicas (principalmente imbornales), y por otra en aquellos donde se les ha avistado en propiedades privadas (en estos casos, y al no poder acceder para aplicar el tratamiento, se crea un cinturón de seguridad aprovechando los imbornales públicos para impedir que puedan expandirse).
Las zonas privadas, el nuevo peligro frente a la plaga
La proliferación del mosquito tigre ha sido especialmente relevante durante la presente temporada debido a la adversa pluviometría (en relación a la plaga) ya que la misma ha sido un 300% superior a la habitual, generando un aumento de focos de cría de mosquitos.
Con la aplicación de este nuevo sistema en las zonas públicas no se puede solucionar el problema del mosquito tigre en su totalidad, principalmente debido a la proliferación de focos en zonas privadas. Por esta razón Lokímica S.A. ha realizado diversas labores de concienciación ciudadana en numerosos pueblos y ciudades de la Comunidad Valenciana con la intención de que aquellas zonas a las que no tiene acceso no sirvan como refugio del Mosquito Tigre.